Pero en este caso, lo siento, no soy capaz de aceptarlo. No transijo. Tal vez porque estoy demasiado involucrada en el tema, pero soy incapaz de consentir ni uno solo de vuestros argumentos.
Intentando realizar un ejercicio de autosugestión quise analizar, imaginar por un momento cómo se sentía aquella madre que presumía de su temprana sexualidad, cómo pudo ser para ella esa “sensación”, y me derrumbé.
(sigue)