No sé si masoquista, pero me regocija que vivir en #Venezuela ha sido como un entrenamiento nivel #DarkSouls y que cuando me vaya (porque me largo, y pronto) tendré la piel gruesa de tanto cargar agua limpia y tanques de gas, de lidiar con apagones y asaltos, comer "lo que hay", etcétera.
Más bien soy optimista: viendo a dónde y con qué habilidades voy, me siento con superpoderes.
Quisiera ser optimista así con los que dejo atrás.